El accidente ocurrió el miércoles por la noche, cuando la embarcación en la que viajaban Romero y otros siete soldados chocó contra un obstáculo y volcó.

El accidente ocurrió durante un ejercicio nocturno de rutina en la zona oeste del río Paraná, cuando el gomón impactó contra un objeto sumergido que no pudo ser identificado. La fuerza del impacto hizo que la embarcación se volcara, arrojando al agua a sus ocho ocupantes.

Casi 24 hora después del suceso, las tareas de búsqueda no cesan, con equipos especializados trabajando contrarreloj para dar con el sargento desaparecido. Este tipo de operativos, que requieren alta precisión, se dificultan debido a las corrientes del río y las condiciones del terreno.

Mientras que los demás tripulantes fueron rescatados y trasladados al Hospital Militar Regional “Paraná”, donde se encuentran fuera de peligro, Romero sigue sin ser hallado. Desde ese momento, se activó un operativo de búsqueda que incluye bomberos, buzos tácticos y agentes de la Prefectura Naval Argentina.

La familia de Romero llegó a la zona para seguir de cerca las labores de búsqueda, que continúan bajo estrictos protocolos establecidos por la Prefectura Naval. En un comunicado oficial, el Ejército confirmó: “Se puso en funcionamiento un operativo de búsqueda con los medios disponibles, cumpliendo los protocolos de la Prefectura”.

El caso generó conmoción tanto en las filas del Ejército como en los vecinos de la zona y la familia del militar. Mientras tanto, las autoridades insisten en su compromiso de utilizar todos los recursos necesarios para encontrar a Romero.