¿POR QUÉ HAY PERSONAS MUY PARECIDAS ENTRE SÍ QUE NO SON FAMILIARES?

Sociedad 04 de enero de 2023 Por Betina Almada
Analizaron 32 parejas de personas que no tienen relación familiar, pero que lucían casi idénticas. Descubrieron que su genética era similar.
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No se conocen, no son familiares, pero se parecen tanto que nadie dudaría si dijeran que son hermanos. Ahora, un estudio científico explicó la razón por qué muchas personas tienen una suerte "doble" en algún lugar del mundo: además de ser parecidas físicamente, su ADN es similar. 

El estudio fue realizado por un grupo de investigadores españoles de la Unidad de Epigenética del Instituto de Investigaciones Biomédicas de A Coruña (Inibic), dedicados al análisis de la genética y publicado en la revista especializada “Cell Reports”. 

Los investigadores analizaron 32 pares de personas extremadamente parecidas, que habían sido reclutadas para un trabajo que nada tenía que ver con la ciencia: habían sido retratadas por el fotógrafo canadiense François Brunelle, que durante dos décadas captó con su lente a personas de apariencia casi idéntica que no eran familiares.  

Los científicos descubrieron que la similitud entre estos “dobles” o “falsos gemelos” no solo era una cuestión de apariencia. Además de ser tener rostros y estructuras físicas similares, eran parecidos a nivel genético.

"Esas personas no solo se parecen en sus caras, sino que también se parecen en su peso, en su altura y también en otros componentes más complicados relacionados con el comportamiento, que van desde el hábito de fumar al nivel de educación", dijo el director de la investigación, Manel Esteller. Y explicó que esto se debe a que descubrieron que "lo que más une a cada pareja de dobles es su secuencia de ADN, su genoma".

Esteller detalló que la similitud en el ADN de estas personas que no están relacionadas se debe "al azar", ya que "hay tanta gente en el mundo que se acaban produciendo genomas similares".

“En 2005 descubrimos que los gemelos idénticos, llamados monocigóticos, tenían el mismo ADN y diferencias en el epigenoma. Así que decidí mirar el otro lado de la moneda: gente que se parecía pero, no eran gemelos. Quería saber cuánto de ese parecido estaba en la naturaleza o en el ambiente que los rodeaba”, explica Esteller.

A pesar de no tener vínculo sanguíneo, los sujetos con rasgos faciales muy similares tendrían un genoma cercano y la diferencia radicaría en su epigenoma y microbioma. El epigenoma es un elemento que se pega a los genes y, aunque no modifica su secuencia, provoca cambios en sus funciones. En tanto, el microbioma es el “ecosistema” de los microorganismos que pueblan el ser humano.

Estos resultados pueden tener implicaciones, incluso, dentro de las ciencias forenses porque la presencia de ADN en el lugar del crimen da mucha información acerca del delincuente, de sus comportamientos, así como de su color de piel, de ojos y de pelo.

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