
Ada Rico, presidenta de La casa del Encuentro, advirtió que la negligencia institucional conocida como feminicidio habilita la reproducción de las agresiones en la sociedad.



En el informe proporcionado por el observatorio "Ahora Que Si Nos Ven" en lo que va del 2025 registramos 228 femicidios, travesticidios, transfemicidios e instigaciones al suicidio en Argentina.
Entre el 1 de enero y el 24 de noviembre, desde el Observatorio Ahora Que Sí Nos Ven relevamos 191 femicidios directos, 25 vinculados, 4 travesticidios y transfemicidios y 8 instigaciones al suicidio, a partir del análisis de medios gráficos y digitales de todo el país.
En un país donde el Estado se retira, los discursos de odio se vuelven política de gobierno y la violencia se profundiza una mujer o persona trans es asesinada cada 35 horas.
Observamos con preocupación el aumento de uso de armas de fuego en los femicidios (25%), un dato alarmante en un contexto donde se incentiva la portación y el accionar represivo.
Los casos recientes muestran la responsabilidad del Estado. En Jujuy, Daniela Mamani fue asesinada por su ex pareja dos horas después de que la policía se retirara del departamento sin ingresar, pese a los pedidos desesperados de lxs vecinxs. Daniela estaba viva cuando quienes debían protegerla eligieron no actuar. La omisión mata. En provincia de Buenos Aires, Treinti, una mujer trans, fue atropellada por un patrullero sin luces; no se sabe quién la atropelló y ningún medio lo informó. La invisibilización también es violencia.
No se trata de hechos aislados, los discursos odiantes impulsados por Milei, Bullrich y Cúneo Libarona son un incentivo directo para la violencia machista.
Recordemos que Argentina fue el único país que votó en contra de una resolución internacional para combatir la violencia contra las mujeres, y desde el gobierno amenazan con eliminar la figura de femicidio del CP.
En 2025 registramos además un 17 % de víctimas que habían denunciado previamente, Hubo 18 femicidas pertenecientes a fuerzas de seguridad y al menos 188 niñxs quedaron sin sus madres.
La Ley 26.485 y los tratados internacionales obligan al Estado a prevenir, sancionar y erradicar la violencia de género, pero hoy ese mandato se incumple por acción u omisión. Por eso afirmamos: el Estado es responsable, el Estado es femicida.
Nuestras vidas están en peligro.





