Cada vez más parejas en Argentina eligen tener un solo hijo

El costo de vida influye en la decisión de las parejas de tener hijos. Aunque va más allá de lo económico, también obedece a cambios culturales profundos.

Sociedad14 de octubre de 2025PrensaPrensa
WhatsApp Image 2025-10-14 at 09.54.26

banner-wapp2

En las últimas tres décadas, la familia argentina se ha transformado de manera profunda. El modelo tradicional de pareja con varios hijos dejó de ser la norma para dar lugar a hogares cada vez más pequeños. La tendencia es clara: cada vez más parejas deciden tener un solo hijo o, directamente, no tenerlos. Este fenómeno, que atraviesa al país en su conjunto, también se refleja en Mendoza, donde la natalidad muestra una caída sostenida y la maternidad se posterga hacia edades más avanzadas.

Lo que antes era motivo de comentario -el “hijo único” como excepción - se ha vuelto un rasgo creciente de la estructura familiar argentina. La decisión no responde a un único factor, sino a la confluencia de elementos económicos, culturales, sociales y demográficos que moldean nuevas formas de organización de la vida en común.

Los datos de la Encuesta Permanente de Hogares y de los censos nacionales revelan que, entre 1991 y 2022, el tamaño promedio de los hogares pasó de 3,6 a 2,9 personas. La proporción de familias nucleares con hijos se redujo 14 puntos porcentuales, mientras que los hogares unipersonales se duplicaron. En paralelo, creció la presencia de hogares monoparentales, en un 80% encabezados por mujeres.

Según el Observatorio del Desarrollo Humano de la Universidad Austral, en 2022 solo el 43% de los hogares tenía hijos menores de 18 años, frente al 56% de 1991. Este dato es clave para entender la magnitud del cambio: más de la mitad de los hogares argentinos ya no incluye niños.

La tasa global de fecundidad en Argentina pasó de 3 hijos por mujer a fines de los años 80 a 1,36 en 2023, una caída de más del 55% en apenas tres décadas. Desde 2014, el país experimenta un descenso abrupto de nacimientos, con una reducción del 40% en menos de una década.

En términos comparativos, mientras que en los años ‘90 la maternidad se concentraba entre los 20 y 24 años, hoy el mayor número de nacimientos se da en mujeres de 25 a 29 años, seguido por el grupo de 30 a 34. Esto refleja un corrimiento del calendario reproductivo y una planificación más consciente de la maternidad y la paternidad.

Te puede interesar