El ciclo de Diego Martínez en Boca Juniors estuvo signado por las lesiones. Algunas más largas que otras y la mayoría de ellas muy recurrentes. La más grave e inoportuna fue la de Lucas Blondel, quien en su mejor momento futbolístico, cuando adquirió la titularidad, sufrió la rotura de ligamentos cruzados, en marzo de este año. 

Fernando Gago "heredó" ese problema en un puesto complicado para el anterior entrenador, que sin Marcelo Wiegandt ni Blondel se quedó sin variantes, hasta la llegada de Juan Barinaga. El actual DT también tuvo ese problema, porque cada vez que Luis Advíncula no pudo ser parte, debió acudir a Barinaga, quien también sufrió golpes que lo sacaron de competencia. En esos casos, improvisó con centrales como Di Lollo o Figal o con volantes como Saralegui. 

Enfocado en lo que se viene y preparando la semifinal de Copa Argentina ante Vélez, Gago comandó una nueva práctica este lunes, que contó con una novedad muy importante: el regreso a la par de sus compañeros del propio Blondel, a ocho meses de su lesión. 

El lateral derecho de 28 años dejó atrás las sesiones de entrenamiento en las que exclusivamente podía estar en kinesiología y gimnasio. Lentamente fue haciendo trabajos en el campo, con leves trotes y caminatas. Sin embargo, este lunes ya se integró a los compañeros y hasta fue parte del trabajo de fútbol reducido. Parte de ese entrenamiento fue retratado y publicado por el Canal de Boca.

Sin embargo, desde el club advirtieron a Olé que el regreso a la competencia de Blondel será muy paulatino y cauteloso, por lo que no hay posibilidades de que el lateral dispute un partido oficial antes de fin de año.