Lourdes Arrieta sigue en la cuerda floja después de su expulsión del bloque libertario. Recientemente, la diputada nacional por Mendoza filtró chats entre diputados libertarios que revelaban un plan para liberar genocidas. Ahora, también, se plantea la posibilidad de que sea despedida de la Cámara baja. Yamil Castro Bianchi, abogado de Lourdes Arrieta, defendió a su cliente en un medio de comunicación y brindó detalles de todo lo sucedido en las últimas semanas.

La diputada declaró a MDZ Radio a finales del mes pasado que, en su visita al penal de Ezeiza, no sabía quién era Astiz a pesar de haber hablado con él. Y durante las semanas siguientes acusó al bloque del que formaba parte de engañarla a ella y a otros diputados para visitar la cárcel. Sin embargo, las conversaciones que reveló hace unos días pondrían en duda estas declaraciones, pues la visita fue planeada con meses de antelación y su propósito expuesto varias veces. Al respecto, el abogado de la diputada dijo que "tanto en los chats como en cualquier tipo de conversación que se haya dado con entre esta gente, en ningún momento se mencionó ni van a encontrar el nombre de los delincuentes que fueron a visitar ese día".

El plan libertario para liberar genocidas habría consistido en un Decreto para buscar que las causas sin condena firme, incluidas las de lesa humanidad, quedaran sin efecto luego de 25 años. "Nunca se ocultó. De hecho, lo he manifestado desde el principio, que siempre se habló de personas vinculadas a estos tipos de delitos, pero sin condena. En la mayoría de los proyectos ustedes van a poder ver cuestiones relacionadas con el tema". El proyecto abordaría la cuestión del 'plazo razonable', que se trata del derecho que tiene una persona a ser juzgada sin que "juicio no se nos estire ad eternum".

Entonces la discusión se venía dando internamente, si se quiere, en forma democrática, sobre estas cuestiones de proyectos", explicó. "Insisto en remarcar esto que es muy importante: La diputada nunca supo que iba a ver a Astiz y eso ha quedado demostrado no solo con lo expuesto en el grupo, sino también por el resto de sus compañeros", resaltó.

Castro Bianchi, sin embargo, admitió que la diputada "creía saber a qué iba", pero que el contexto se tornó mucho más turbio de lo que inicialmente pensaba. "La visita la podemos dividir en dos etapas". La primera etapa, según el abogado, tuvo que ver con el Servicio Penitenciario. Les explicaron el funcionamiento del penal a los invitados y vieron el estado de los presos. Todo habría cambiado en la segunda etapa, "cuando fueron a ver a estos delincuentes. Por eso insisto en remarcar que no sabían a quiénes iban a ver. Uno cuando va a la cárcel sabe que va a ver a presos. De eso no hay ninguna duda", explicó.

Al ser cuestionado por la famosa foto tomada en el penal, en la que la diputada aparece en primera fila, fue tomada dentro de un ámbito institucional y rodeada de agentes del Servicio Penitenciario". 

Por último, el abogado también comentó sobre la posibilidad de que Arrieta sea expulsada de la Cámara de Diputados y recalcó que Arrieta "siempre ha apoyado los proyectos de Javier Milei", y cuestionó las razones detrás de su posible expulsión: "¿Y por qué expulsarían Arrieta del Bloque? ¿Porque tenía un patito en la cabeza hace unos meses y que no han podido anunciar en su momento? ¿Por el escándalo, entre comillas, del otro día, donde filtraron una partecita de toda la reunión y que solamente hablaba Arrieta? No hay una explicación coherente. Esto sería abrirle la puerta a la expulsión de cualquier diputado y afectar a la democracia", concluyó.