En un procedimiento abreviado realizado en la Sala VII del Tribunal de Juicio, un sujeto de 54 años fue condenado a la pena de ocho meses de prisión condicional por resultar autor del delito de usurpación de propiedad por abuso de confianza.

La jueza Paola Marocco ordenó que el imputado continúe en libertad por la modalidad de cumplimiento de la pena dictada. Para conservarla, el sujeto deberá cumplir una serie de obligaciones durante dos años: fijar residencia en la ciudad de Salta e informar al tribunal cualquier cambio de domicilio; someterse al control mensual del Programa de inserción social y supervisión de presos y liberados de Salta; prohibición de acercamiento al denunciante en un radio de 300 metros; abstenerse de ejercer actos de violencia física y psíquica en perjuicio del damnificado; prohibición de acercamiento a la Asociación Betania (Cerrillos) en un radio de 300 metros, abstenerse de usar estupefacientes y de abusar de las bebidas alcohólicas. Todo ello con estricto apercibimiento de revocarse la condicionalidad de la condena en caso de incumplimiento injustificado.

El imputado fue denunciado por el presidente de la entidad civil Betania. Relató que firmó un contrato de comodato con el acusado el 14 de octubre de 2019, sobre un inmueble ubicado en Villa Esmeralda (Cerrillos), propiedad de la Asociación Civil Betania.  El comodato vencía el 31 de marzo de 2020. El 1 de abril de ese año y a petición del acusado, se le otorgó una extensión del contrato, el cual fue debidamente instrumentado.

Se estableció que la fecha de finalización sería el 30 de abril de 2020, pero el imputado no quiso firmar la extensión. Por ello, vencido dicho plazo, se le solicitó al condenado la entrega de la propiedad, pero se negó a retirarse del inmueble abusando de la confianza conferida al momento de realizar el contrato.