En la conferencia de prensa posterior al encuentro que mantuvieron en Casa Rosada, Alberto Fernández y Lula da Silva intercambiaron elogios y anunciaron una nueva era de cooperación y fortalecimiento de las relaciones entre ambos países. Además, el presidente brasileño pidió perdón al pueblo argentino "por las groserías de Bolsonaro" y aseguró que, a partir de ahora, el país "será tratado con el cariño que se merece".

El líder del PT brasileño expresó: "Quiero decirles que en realidad le estoy pidiendo perdón al pueblo argentino por todas las ofensas y groserías que el anterior presidente, de quien yo digo que es un genocida por la falta de cuidado y de responsabilidad que tuvo durante la pandemia, le hizo al compañero Alberto Fernández".

"Un país con la grandeza de Brasil, con su extensión territorial, con 6 mil kilómetros de frontera con Sudamérica, que es más grande industrialmente, no tiene derecho de buscarse enemigos", sostuvo Lula.

El mandatario del país vecino agregó que "necesitamos construir amigos, socios y por eso quiero afirmar que Brasil está nuevamente de brazos abiertos para acoger a los compañeros argentinos, en los negocios, la cultura, el fútbol y en la mantención de la relación de amistad que tenemos desde hace tantos años".

"Gracias a Dios los argentinos volvieron a Santa Catarina y espero que algún día conozcan mi estado de Pernambuco y puedan conocer el nordeste brasileño", añadió, con una sonrisa.