Uno de los médicos que tenía Matthew Perry, Salvador Plasencia, se declaró culpable este miércoles de cuatro cargos de distribución de ketamina y enfrentará la sentencia el próximo 3 de diciembre. Podría ir 40 años a la cárcel.

Como parte del acuerdo, Plasencia, de 43 años, entregará su licencia médica en los próximos 30 a 45 días, de acuerdo a lo que informó la Fiscalía Federal. Al no estar detenido, permanecerá en libertad bajo fianza a la espera de que se determine su sentencia.

Las acciones de Plasencia fueron determinantes para la muerte de Matthew Perry en 2023. El médico aceptó el acuerdo de culpabilidad en el que admitió que distribuyó ketamina sin un propósito médico legítimo al actor de Friends, que sufrió una sobredosis letal.

Gracias al acuerdo que selló, los fiscales le sacaron los cargos de falsificación de registros y otros referidos a la distribución de la droga que pesaban sobre él.

La única acusada restante en el caso, Jasveen Sangha, apodada la “Reina de la Ketamina”, tendrá que ir a juicio el próximo mes. Se le acusa de tener un búnker en North Hollywood desde donde distribuía la droga.

Plasencia enfrenta un máximo teórico de 40 años tras las rejas, aunque es posible que reciba una pena menor de acuerdo a la jurisprudencia que hay con respecto a casos similares.

Lo complejo del caso, sin embargo, ubica al médico en una posición difícil. Los fiscales comprobaron que una vez que se enteró de la muerte de Perry, Plasencia ideó un falso tratamiento con ketamina para ocultar el rastro de la droga, que llevaba su firma.