La Policía Municipal de Madrid clausuró un restaurante chino que incumplía los controles sanitarios, con carne y pescado sin etiquetar, cucarachas correteando por la cocina, trampas para ratas en el suelo y en el que se servían palomas muertas de la calle como si fueran pato laqueado.

Según informó EFE, la clausura se produjo el pasado 25 de marzo, cuando agentes de la Policía Municipal acudieron al establecimiento Jin Gu, ubicado en Usera, distrito conocido como el barrio chino de la capital española. Una vez allí, constataron que se servían comidas en condiciones de insalubridad.

En la cocina había ocho congeladores con carnes y pescados sin etiquetado, trazabilidad, ni fecha de control, como tampoco termómetros para determinar la temperatura. También se encontraron palomas, patos, envases de aditivos y colorantes alimentarios y bolsas con plantas.

Los investigadores creen que las palomas eran cazadas en la calle. Luego de matarlas, las desplumaban y las ofrecían como pato laqueado.

En el cuarto de basuras había un contenedor de plástico abierto con 100 litros de grasa dentro y una vitrina refrigeradora con berberechos, dátiles, holoturias o pepinos de mar.

El dueño del restaurante chino está siendo investigado por delitos contra la salud pública, la fauna y la flora, así como por vulnerar los derechos de los consumidores.