Fue denunciado por dos madres por contacto impropio a través de redes sociales que involucró a dos menores de edad.

La investigación se inició a partir de la denuncia de una de las mujeres que descubrió conversaciones inquietantes en la tablet de su hija de 13 años. Según su testimonio, tomó conocimiento por la mamá de una compañera de la niña, de que un adulto desconocido estaba enviando mensajes a su hija a través de WhatsApp.

Al revisar el dispositivo, constató mensajes de un número desconocido en los que un individuo se identificaba como “Nico” y realizaba preguntas personales inapropiadas, llegando incluso a solicitar fotografías a la menor y enviando imágenes configuradas para verse una sola vez. La mujer bloqueó el contacto tras percatarse del contenido de los mensajes que habían sido enviados el 11 de febrero pasado.

El mismo día, se sumó otra denuncia por parte de la madre de la otra menor de 13 años, quien también había recibido mensajes del mismo número de teléfono. En este caso, la niña, acompañada por su mamá, a quien le había contado que recibió un mensaje por WhatsApp de una persona que decía tener 27 años y vivir cerca de un centro de salud del barrio Castañares.

El hombre también envió una fotografía configurada para verse una sola vez, aunque fue interceptada por la mujer, que lo vio mostrando su torso desnudo y el rostro. La madre de esta segunda menor se alarmó especialmente porque su hija iba a clases de boxeo en un club que quedaba cerca de domicilio que mencionó el remitente de los mensajes.

Ambas menores habían recibido mensajes del tal “Nico” enviados desde el mismo número telefónico.

Tras las investigaciones correspondientes, se identificó al titular del número de teléfono como un hombre de 34 años.

En la audiencia flexible y multipropósito el juez de Garantías interviniente escuchó a las partes, que le informaron que habían llegado a un acuerdo de juicio abreviado. El acusado manifestó comprender el acuerdo y prestó su conformidad de manera clara y precisa con los hechos que se le imputaban, aceptando su responsabilidad y la pena solicitada.

En tanto, las representantes legales de las menores también expresaron su conformidad con el acuerdo alcanzado, aunque una de ellas solicitó además que se dicte una prohibición de acercamiento hacia su hija.

Finalmente, el juez declaró procedente el acuerdo de juicio abreviado y lo condenó a la pena de seis meses de prisión de ejecución efectiva por ser autor del delito de grooming en relación a la denuncia de la primera menor. Además, fue declarado reincidente por cuarta vez atento a que ya tenía antecedentes condenatorios.

En cuanto a la segunda denuncia se dispuso su sobreseimiento por atipicidad según lo solicitó el propio órgano acusador en manos de la fiscal interviniente.

Se dispuso también la prohibición de acercamiento del condenado al lugar de residencia de las menores víctimas, a los lugares que frecuenten y de mantener contacto con ellas por cualquier medio, y la obligación de realizar un tratamiento psicológico y psiquiátrico, previa evaluación profesional.

Finalmente, se ordenó su incorporación al Banco de Datos Genéticos. Será trasladado a la Unidad Carcelaria 1 para el cumplimiento de la pena impuesta.