La residencia de Vladimir Putin en el Kremlin fue atacada con drones este miércoles. Los aparatos fueron derribados por la defensa rusa y el mandatario resultó ileso. Rusia responsabilizó a Ucrania por el atentado y sostuvo que se reserva el derecho de responder.

El Kremlin dijo que Putin no resultó afectado y que Rusia se reservaba el derecho de responder a este "intento de asesinato", informó la agencia de noticias rusa Sputnik.

El Kremlin sostuvo que se trató de un "atentado contra la vida del presidente" y un "ataque terrorista planificado" por el Gobierno de Ucrania. Según informó en un comunicado, fueron desactivados "gracias a la utilización de sistemas de radar".

Noticia en desarrollo