Si en el futuro usted o su hijo o hija decide que quiere ser tratado de una manera distinta, no de acuerdo con su sexo al nacer, ¿se compromete a trabajar con la institución para buscar un pase?», plantea la solicitud para nuevos alumnos.

A esta advertencia, el colegio indaga acerca de la conformación familiar de cada niño: “Los padres son: ¿casados y viven juntos? ¿separados? ¿no casados y convivientes?”.

La incomodidad que sintió esta familia fue llevada al INADI ya que consideraron que se trata de una vulneración de derechos. El delegado provincial del organismo, Gustavo Farquharson, reconoció que recibieron la denuncia y que se informó al Ministerio de Educación de la Provincia, pero que aún no tienen respuestas de la cartera ni del colegio.

En el marco legal se establece que «nadie puede sufrir ningún tipo de discriminación por su color de piel, su aspecto físico, orientación sexual o identidad de género”. Para Farquharson las instituciones educativas no pueden aplicar el “derecho de admisión” y quien tiene la responsabilidad de hacer cumplir la normativa es el Ministerio de Educación