El caso del guardia de tren que mató a un hombre de una trompada en la estación de trenes de Lugano generó conmoción luego de que se difundiera el video clave de la causa, donde puede verse el momento exacto en el que ocurrió el crimen.

A pesar de que el hecho se produjo el 2 de diciembre del año pasado, se dio a conocer recién ahora por el pedido de justicia de la familia de la víctima. El agresor, identificado como Elías Ezequiel Colman (34), aún permanece libre.

La víctima se trata de Miguel Ángel Morinigo, tenía 46 años, era albañil y había venido desde Paraguay para una operación de cadera, ya que padecía artrosis y no podía caminar con normalidad. Había vivido diez años en Lugano, pero ahora residía con sus padres, de 72 y 70 años, en el país vecino. “Miguel era la compañía de ellos. Trabajaba allá en la siembra de arroz, la cría de animales”, contó Lucy Morinigo, su hermana, en declaraciones.

El día del hecho, el hombre había estado trabajando en una obra y luego salió a cenar y a beber con un compañero. Más tarde, buscó volver a la casa de su hermano Jorge -que se había ido a Paraguay a visitar a sus padres- ubicada en González Catán y se dirigió a la estación de trenes de Lugano. Sin embargo, era tarde, ya que el último servicio del ferrocarril Belgrano Sur acababa de salir y discutió con el guardia, quien intentó echarlo al explicarle que ya no habría más trenes hasta las 4 de la mañana del día siguiente.

De un momento a otro, en un forcejeo que se produjo porque Morinigo se resistía a retirarse, el guardia comenzó a empujarlo hacia la salida. Así fue cómo, la víctima, visiblemente alcoholizada, lanzó una trompada que el empleado logró esquivar, aunque su respuesta fue letal: le pegó de lleno en la cara y cayó de espaldas, por lo que el albañil se golpeó la cabeza contra el suelo y quedó inmóvil.

Luego de 45 minutos del hecho, cerca de las 24, acudió una ambulancia para asistir al albañil, que fue trasladado al Hospital Santojanni. Allí, llegó con traumatismo de cráneo, hemorragia meningoencefálica y neumopatía.

De acuerdo al testimonio de Lucy y Nilda, hermanas de Morinigo, él era “un hombre bueno y merece justicia”. El miércoles 6 de diciembre, luego de tres días de permanecer internado, Miguel Ángel fue diagnosticado con muerte cerebral y, un día después, lo desconectaron. “Miguel nunca fue de reaccionar, nunca fue un hombre provocador. Rengueaba por su problema en la cadera y el guardia, en lugar de ayudarlo, lo sacó a los empujones. Todo se ve en el video”, agregó una de ellas.

Cuál es el estado actual de la causa
La causa fue caratulada como “homicidio preterintencional” por decisión de Gustavo Pierretti, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°13 y, por el momento, no ordenó la detención de Colman.

En este caso, la figura aplica cuando el imputado no tiene intención de matar, pero su accionar provoca la muerte de otra persona por accidente. Según el artículo 81 del Código Penal, se prevé una condena de entre 1 a 6 años de prisión. Por esta razón, la familia de Morinigo se encuentra reclamando un cambio de carátula a “homicidio simple”, que prevé entre 8 a 25 años de cárcel.

“Colman mintió. Dijo que había encontrado a una persona desmayada, tirada. Que no sabía lo que le pasó, que creía que Miguel se había caído y se golpeó la cabeza. ¿Eso no es desviar la investigación?”, cuestionó Lucy, una de las hermanas de Morinigo.