Uno de los hechos históricos que se recuerda en la lucha por la independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata, se llevó a cabo el 20 de febrero de 1813. Ese día tuvo lugar la Batalla de Salta, entre las fuerzas patriotas al mando del general Manuel Belgrano y las españolas conducidas por el general Pío Tristán. La contienda se decidió a favor de las tropas patriotas. Fue un triunfo clave en pos de lograr el objetivo de echar a las tropas coloniales del territorio patrio.

El Monumento a la Victoria de Salta o el Monumento al 20 de febrero, surgió tras la decisión de la Asamblea General de construir un monumento en honor a la memorable Batalla de Salta y la importante victoria en defensa de los principios de la independencia.

La obra nació de un monumento de ladrillo, una cruz de madera y la donación de cuatro manzanas situadas en el campo de la Cruz. La prolongación de la guerra y los conflictos civiles demoraron la ejecución.

La obra de bajorrelieves está compuesta por la representación de cuatro momentos que retratan el paso de Belgrano por Salta:

Formación del Ejército del General Manuel Belgrano en el Río Las Piedras con la leyenda: “La sangre de los que murieron aquí ha sido vengada en Tucumán y la de los que han muerto allí será vengada en Salta”.

El Juramento de la Bandera sobre las márgenes del Río Pasaje, con la leyenda: “Este será el color de la nueva divisa con que marcharán a la lid los nuevos campeones de la Patria”.

La capitulación del General Pío Tristán, copia del cuadro existente en la Legislatura, con la leyenda: “Capitulación del General Pío Tristán, en Castañares el 20 de Febrero de 1813”.

Fisonomía del Campo Castañares y de la Batalla del 20 de Febrero de 1813, con la leyenda: “Batalla en Castañares el 20 de Febrero de 1813”.