La joven estaba con su pareja cuando ocurrió el accidente, estaba haciendo trekking con su novio cuando fue sorprendida por un deslizamiento de barro y piedras.

Todo comenzó cuando caminaban por un sendero de montaña en dirección al Refugio San Martín, en el Lago Jakob, ubicado a 1.600 metros sobre el nivel del mar. La grandiosa experiencia quedó opacada por un temporal de fuertes lluvias y vientos que generó un crecimiento repentino en el caudal del río y provocó un alud de piedras y barro que arrastró a la joven cuando realizaba la caminata. El hombre no sufrió heridas pero Lucía quedó sepultada bajo el barro.

Un turista que compartía el recorrido fue quien dio aviso de  lo sucedido y orientó al equipos de rescate.

Cordeiro, el turista amigo, logró agarrarse de una rama esquivando el deslizamiento de barro y piedras. “Por medio metro no me arrastró a mí también, alcancé a agarrarme de una rama y cuando miro, el barro y las piedras que bajaban de la montaña arrastraron a la chica”, relató.

El novio de Lucía había cruzado el arroyo y esperaba a su novia pero el terrible episodio fue más rápido y el alud sorprendió a la joven arrastrándola entre la nieve.