LA PELIGROSA CÁBALA DE UN ARGENTINO QUE TERMINÓ CON SUS DEDOS FRACTURADOS

Por suerte el país no está tan lleno de supersticiosos, ¿o sí? Leonardo, de Quilmes, Buenos Aires, es un joven muy apegado al fútbol, juega en Los Andes y actualmente está en Qatar cumpliendo el sueño de muchos mientras vive las victorias de la Selección Argentina en el país del continente asiático.
Un motivo en particular es lo que llevó a hablar del supersticioso muchacho que vio todos los partidos con la misma ropa, pero aun así no fue suficiente y a su cábala le sumó un peligroso reto: arrojarse de una tribuna a la otra.
“Llegué para el partido contra Polonia y me perdieron la valija, así que vine al estadio con lo que tenía puesto y no cambié más. Sigo viniendo con la misma ropa”, contó en TN y agregó “si hoy me revisás la valija, vas a encontrar 15 camisetas de Argentina, pero como no me la puse el primer partido dije ‘ya está, me pongo lo mismo de siempre’”.
Y no termina ahí su ritual, la ropa interior también viene en el paquete. “Lavo el boxer un día antes de cada partido para tenerlo listo. No puedo ponerme otro. La ubicación es otro de los temas que me preocupan”, cuenta Leonardo.
Con las victorias de Polonia y Australia, Leo estaba en el mismo lugar, historia diferente a cuando Argentina se enfrentó a Países Bajos, en donde consiguió una entrada en una tribuna de arriba.
Una vez adentro del estadio Lusail, mientras las tribunas se iban poblando de hinchas argentinos, el joven argentino estaba preocupado: “Me puse mal porque sentía que rompía una de las cábalas. No podía verlo ahí. Así que, nada, me tiré”.
“Del punto de la hinchada donde estaba, me tiré 10 metros para abajo y los hinchas me agarraron, pero igualmente me fisuré dos dedos”, dijo a la par que enseñaba sus fracturas en su mano derecha. “Me ayudaron los hinchas, acá ya nos conocemos todos los argentinos. Nos conocemos las cábalas, y yo antes de cada partido les digo: ‘miren que si yo no consigo, me tengo que tirar porque tengo que estar con ustedes’”.
Además, antes de finalizar la nota, aseguró que no lo pensaría dos veces si tiene que hacer lo mismo. "-Sé que no está bien, pero hay que respetar las cábalas. Y por un pase a la final estoy dispuesto a todo. En cuanto los guardias se descuiden, me vuelvo a tirar".