Desde hace unos meses, cuando se conocieron las camisetas que la Selección Argentina tendría para el Mundial de Qatar, la indumentaria alternativa del plantel comandado por Lionel Scaloni causó mucho revuelo por la particular elección de utilizar por primera vez en la historia un tono violeta que rompe el molde.

Según diagramó la organización del torneo, la Selección Argentina es quien tendrá que cambiar su indumentaria para enfrentar a Polonia pese a que los europeos también jugaron sus primeros dos partidos con la titular. Una decisión de FIFA que llamó la atención de los hinchas pero que tiene su explicación.

Según lo dictó el sorteo, al ser cabeza de serie, la Selección Argentina figuró como el equipo A (local) en sus dos primeras fechas y ahora, en este último partido de grupos, será el Equipo B (visitante). De esta manera, al predominar el blanco en las dos selecciones, quien debe cambiar es la visita.