Este jueves, la empresa Meta, comunicó que no eliminarán las publicaciones hostiles al ejercito y los lideres rusos, a pesar de estar incumpliendo con la política de incitación a la violencia y el odio de la empresa. El gerente de Comunicaciones de la empresa, Andy Stone, dijo que ”Debido a la invasión rusa de Ucrania somos indulgentes con formas de expresión política que normalmente violarían nuestras reglas sobre el discurso violento, como ‘muerte a los invasores rusos’”.

Los países que podrán contar con estas excepciones son Armenia, Azerbaiyán, Estonia, Georgia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Rumania, Rusia, Eslovaquia y Ucrania. Esta información quedo grabada en unos correos electrónicos intercambiados por moderadores de contenido de Meta a los que ayer tuvieron acceso medios internacionales.

Roskomnadzor, el Servicio Federal de Supervisión de las Telecomunicaciones, Tecnologías de la Información y Medios de Comunicación ruso informó que ”en virtud de la solicitud de la Fiscalía General de la Federación de Rusia, el acceso a la red social Instagram en el territorio ruso será restringido”, según recogió la agencia de noticias Sputnik.

La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de Naciones Unidas señaló su preocupación a partir de las medidas tomadas por Meta. Elizabeth Throssel, vocera del organismo, durante una rueda de prensa en Ginebra, dijo que “Este es claramente un tema muy, muy complejo, pero que genera preocupaciones en términos de derechos humanos y derecho internacional humanitario”

No es la primera vez que Meta permite publicaciones violentas. Twitter, por su parte, no borró un tuit de la senadora republicana estadounidense, Lindsey Graham, la semana pasada, en el que pedía el asesinato del presidente ruso, Vladimir Putin, para poner fin a la guerra. En Rusia, la semana pasada, se aprobo una ley que castiga con hasta 15 años de prisión a quien difunda información destinada a “desacreditar” a las fuerzas militares rusas o pedir sanciones contra Moscú.