
El organismo presentó una acusación penal contra la entidad deportiva por la supuesta retención y falta de depósito de impuestos y contribuciones, lo que habría generado un perjuicio fiscal superior a siete mil millones de pesos.


Aunque su rol siempre fue relevante en la prevención del contagio de coronavirus, los barbijos vuelven a ser el centro de la atención debido a la gran circulación viral en un contexto donde la movilidad y las actividades están al cien por ciento, por lo que mejorar su eficacia -con material y ajuste adecuado- es clave para poder transitar con la mayor protección posible.
Nacionales18 de enero de 2022
Rouse Leonor
Argentina transita esta nueva ola por coronavirus con un alto porcentaje de su población vacunada: más del 85% recibió una dosis, el 74% tiene dos dosis y avanza el refuerzo, lo que contribuyó a que, pese a la gran cantidad de contagios diarios -que alcanzó cifras récord la semana pasada con más de 130 mil notificaciones en un día-, las terapias intensivas no se vean todavía comprometidas.


Pero el virus circula e infecta, y pese al "desacople" entre la curva de casos e internaciones (una crece de manera abrupta y la otra apenas), muchos contagios pueden provocar también muchos muertos.
"En este contexto, y frente a un momento de la pandemia en el que no es posible poner restricciones a la movilidad y a las interacciones sociales, una de las formas más viables de sostener la actividad y a la vez prevenir es mejorar la calidad de los barbijos y para eso necesitamos varias cosas", señaló a Télam la investigadora de Conicet Sol Minoldo.
La especialista destacó dos puntos centrales para mejorar la eficacia de los barbijos: el material y el ajuste. "El objetivo es que todo el aire inhalado y exhalado pase a través del barbijo", describió.

El organismo presentó una acusación penal contra la entidad deportiva por la supuesta retención y falta de depósito de impuestos y contribuciones, lo que habría generado un perjuicio fiscal superior a siete mil millones de pesos.

El organismo prohibió la comercialización, uso y publicidad de productos capilares de la marca Lazios Professional tras comprobar que no estaban inscriptos y que podían contener formol, una sustancia no autorizada por su riesgo para la salud.







