Según el parte facilitado por el Gabinete de Seguridad Institucional, el jefe de Estado no tiene previsto someterse a una nueva operación, aunque seguirá en observación, precisó el medio local Estadao, uno de los más importantes del país vecino.

Bolsonaro lleva semanas de silencio absoluto desde su derrota en las elecciones presidenciales del pasado 30 frente a Lula da Silva. Desde entonces, solo ha aparecido una vez en público, en un discurso de menos de tres minutos en los que aseguró que seguiría “cumpliendo todos los mandatos de la constitución” respecto a la transición.

El último miércoles, el vicepresidente Hamilton Mourao se refirió a la ausencia del Jefe de Estado en diálogo con O Globo, y argumentó que se debía a una enfermedad cutánea que le ha producido una herida en la pierna y que le impide dejar su residencia oficial.