El sujeto fue denunciado por su pareja, por un hecho ocurrido en el barrio San Francisco de Cafayate. La mujer relató que se encontraba en su casa, junto a su familia, y tomó su celular. El imputado le preguntó con quién se mensajeaba y ella le dijo que estaba revisando su cuenta de Facebook. Entonces él le dijo que le muestre el teléfono. Ella se negó y comenzó a insultarla y a golpearla.

La jueza María Victoria Montoya Quiroga, vocal de la Sala II del Tribunal de Juicio, ordenó la libertad del condenado por la modalidad de la condena dictada y le fijó reglas de conducta que deberá cumplir durante dos años. Entre ellas: procurar o mantener una actividad laboral lícita y de acuerdo a sus capacidades; someterse a tratamiento psicológico a fin de revalorizar el rol de la mujer y presentar las constancias correspondientes cada seis meses hasta obtener el alta; abstenerse de ejercer actos de violencia física o psíquica en contra de la denunciante. Todo ello con apercibimiento de revocarse la modalidad de prisión en suspenso.

La jueza ordenó finalmente la extracción de material genético del condenado por parte del Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), previa asignación del Dato único de Identificación Genética (DUIG), para su incorporación en el Banco de Datos Genéticos.