La información que brinda la institucion es que el dueño habia conseguido los elementos en el exterior y al momento de pasar la Aduana al personal del escaner le resultó "muy extraño" lo que estaban observando. Allí fue cuando se hizo la verificación y encontraron una águila nazi y otros objetos similares.
A partir de ese momento, se comenzó una investigación y le dieron curso normal a la causa, que concluyó cuando un oficial de la policía se hizo pasar por el hombre que entregaba el correo -había que llevarlas a la casa-, identificaron a la persona y comenzaron un seguimiento. Un tiempo después, se realizó el allanamiento que concluyó con el secuestro de importante material nazi.
El operativo fue ordenado por el juez penal económico Marcelo Aguinsky por infracción a la ley 23.592. El propietario de los objetos fue llevado a la delegación para identificarlo.
La Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) también colaboró activamente para que se logre la aprehensión de los elementos.